Emitimos certificado de retardante de fuego tras la aplicación profesional. Garantiza seguridad, cumplimiento normativo y respaldo técnico para inspecciones y auditorías.
Certificado de retardante de fuego.
Respaldo legal y garantía de protección.
En temas de seguridad contra incendios, la prevención no termina con la aplicación de un producto. Para muchas empresas, instituciones y locales comerciales, contar con un certificado de retardante de fuego es clave para cumplir con normativas, licencias municipales, auditorías de Defensa Civil y seguros.
Este documento respalda que tus telas, mobiliarios o estructuras han sido tratadas con productos ignífugos certificados, bajo protocolos técnicos adecuados. Es la evidencia oficial de que tu establecimiento está protegido y cumple con la ley.
¿Por qué es importante aplicar retardante de fuego?.
Las telas, cortinas, paneles acústicos, muebles tapizados y estructuras de madera tratada, entre otros elementos decorativos y funcionales, son fácilmente inflamables. Un incendio puede iniciarse en segundos, y si estos materiales no cuentan con protección ignífuga, el fuego se propaga rápidamente.
Al aplicar un retardante de fuego, se crea una barrera química que reduce o retarda la combustión, brindando tiempo para actuar, evacuar y controlar la emergencia. Además de la seguridad física, es fundamental para que ciertos negocios puedan operar legalmente.
¿En qué consiste el servicio y cómo se aplica?
El servicio de aplicación de retardante de fuego para telas y materiales combustibles consiste en tratar superficies textiles y similares con un producto especializado que reduce su inflamabilidad. Este producto crea una barrera protectora que retrasa la combustión en caso de contacto con una fuente de calor o fuego.
El procedimiento incluye los siguientes pasos:
1. Evaluación técnica:
Nuestros especialistas inspeccionan el tipo de material a tratar (cortinas, tapices, paneles acústicos, muebles, etc.) para determinar la mejor forma de aplicación y el producto más adecuado según la normativa vigente.
2. Limpieza previa:
En caso necesario, se limpia la superficie para asegurar una mejor adherencia del producto.
3. Aplicación del retardante:
Se aplica el producto mediante aspersión controlada o inmersión, dependiendo del tipo de tela y el entorno. La técnica garantiza una cobertura uniforme y profunda en las fibras del material.
4. Secado natural o acelerado:
Después de la aplicación, se deja secar el material completamente, asegurando que el producto penetre bien y se adhiera a largo plazo.
5. Inspección final y emisión del certificado:
Una vez verificado que todo ha sido tratado correctamente, se emite el certificado de tratamiento ignífugo, el cual incluye información detallada del trabajo realizado, el tipo de producto aplicado, la fecha, la vigencia y los datos de nuestra empresa como entidad certificadora.
Este proceso no altera el color, textura ni apariencia de las telas. Además, utilizamos productos ecológicos, no tóxicos, inodoros y seguros para personas, mascotas y el ambiente.
Solicita tu tratamiento y certificado hoy mismo.
En cada proyecto, nuestro compromiso es brindar un servicio de calidad con resultados comprobables. Al finalizar la aplicación del retardante de fuego, recibirás un certificado oficial, válido ante las entidades fiscalizadoras y elaborado según los estándares requeridos por las normativas locales y nacionales.
¿Tienes una próxima inspección de Defensa Civil? ¿Tu seguro exige pruebas de prevención contra incendios?
Con nuestro certificado de retardante de fuego, tendrás la tranquilidad de cumplir con todos los requisitos, demostrando que tu negocio está adecuadamente protegido.